1 año con Cachorrito

A este paso, se me junta con el mes siguiente, pero es que últimamente no tengo tiempo de nada.

Parece mentira cómo pasa el tiempo. Un día estás embarazada y, cuando quieres darte cuenta, la peque tiene un año.

La revisión nos confirmó lo que ya sabíamos: Es más alta que su hermana. Y, por primera vez, también pesaba más. Sin embargo, su perímetro craneal es menor.

A nivel de motricidad general, se mueve muy bien. Camina agarrándose a las cosas y da pequeños pasos sin sujeción. Además, es muy bailona y me parto de risa con su movimiento de cadera. Por otro lado, me encanta lo que yo llamo "paso de esgrimista", una estrategia de desplazamiento en genuflexión y estirando un brazo hacia delante en el que, generalmente, lleva algún juguete.

A nivel de motricidad fina, estamos en la fase de poner tapas y meter unas cosas dentro de otras, para luego sacarlas. También disfrutamos desmontando torres de bloques y ya utilizamos la cuchara, aunque sin mucho éxito.

Verbaliza mucho. Dice varias palabras y hace cosas que me alucinan, como cantar segundas voces en las canciones. Vamos, que me hace los coros...

Su relación con su hermana es una pasada. Se buscan, quieren el mismo juguete, hacen sus tratos... Nadie la entiende mejor que su hermana, aunque tampoco me sorprende: Es la persona con la que más tiempo pasa.

Los desconocidos no le hacen mucho tilín. Es una niña resevada, aunque acepta atenciones y mimos.

Le encantan los cuentos, sobre todo los troquelados. Por eso su regalo ha sido la adaptación de Carmen Gil de "El oso que se comió una mosca". Me hace mucha gracia, porque no sólo pasa las páginas, sino que, además, las agita para dar movimiento a los troquelados.

Es una artista. Le gusta pintar, manipular, hacer "música", canturrear... Y copiar a su hermana.

Tiene mucho carácter. Si algono le sale, se coge una perreta de aúpa. Confieso que, a veces, me descoloca. No me gustan esos arrebatos y es muy difícil de consolar.

El baño es uno de sus momentos favoritos del día. Lompasa en grande con su hermana y se cabrea cuando la sacamos.

En cuanto a la comida, no se priva de nada. Come de todo y en csantidad. Estoy encantada con su progresión.

Es una niña maravillosa y es un privilegio ser su mamá. Sólo siento pasar tan poco tiempo con ella últimamente. Tengo que aprovechar este tiempo que Dios nos regala.